Ser monstruoso de la mitología aragonesa, nacido de la unión de un macho cabrío y una mujer, que, según la leyenda recogida por Ángel Garí en Bailo, podía convertirse en pastor o en macho cabrío, sembrando el terror entre los pastores por su monstruosa apariencia.
Leyenda[]
Cuentan en Riglos, que el personaje de esta historia, era hijo de una pastora y de un buco. Vivió hace muchos años, en compañía de su madre y de la soledad. Junto a su rebaño. La vida salvaje, y la fortaleza física que mostraba, hicieron que fuese tan temido como asustadizo. Su apariencia caprina, su cuerpo con una abundancia de pelo inusual y unas dotes de agilidad poco comunes, hicieron que se ganase el apodo de Hombre Choto.
Conocía de vista a muchas mujeres, pero nunca había cruzado ni una sola palabra con ninguna. Es más, lo apedreaban, le insultaban o se reían de él y de su aspecto.
Un día vio una a la que jamás antes había visto. Era diferente. No era una pastora como su madre ni como las otras que conocía. Vestía diferente, su piel era más blanca y fina, y hasta olía diferente. La siguió durante algunos días a escondidas mientras paseaba. Cuando ella se paraba, el se acercaba hasta que podía sentir su olor con toda intensidad. Después regresaba hasta su casa embriagado por aquel aroma que ya no podía olvidar. Como es natural ella también se percató de su presencia por el olor que desprendía. Y al final, surgió una sincera amistad.
El Hombre Choto hablaba con ella de todo lo que jamás había hablado con ninguna otra persona. Se encontraba a gusto con ella. Y hasta se llegó a enamorar más de lo que imaginaba.
Ella, estaba allí por una enfermedad que sufría. Sentía mucha lástima por su amigo. El le ayudó con su conocimiento de todas las plantas hasta que sanó totalmente, momento en el que ella desapareció.
El sentía amor, y ella solo lástima, lo que condujo al Choto a la desesperación y a la locura. La buscaba por todos los sitios que conocía. La buscó día y noche.Llegó a tal estado de locura, que una noche sin Luna se arrojó desde lo más alto de los Mallos.
Y dicen los que pasean cerca de estas rocas en las noches oscuras de primavera que todavía se le oye llamando a ella y arreando a su rebaño.
Fuentes[]
Seres míticos y personajes fantásticos españoles. Martín Sánchez.